No somos del mundo...

"Yo les he dado tu palabra; y el mundo los aborreció, porque no son del mundo, como tampoco yo soy del mundo." Juan 17.14

"No ruego que los quites del mundo, sino que los guardes del mal. No son del mundo, como tampoco yo soy del mundo." Juan 17.15-16

"Santifícalos en tu verdad; tu palabra es verdad. Como tú me enviaste al mundo, así yo los he enviado al mundo." Juan 17.17-18

Mientras sigamos buscando nuestra felicidad en el mundo, y sigamos pidiendo para nuestros deleites, pediremos y no recibiremos del Señor; no habrá gozo ni paz en nuestro corazón... porque no somos del mundo; porque nuestra felicidad no está en las cosas de este mundo. La lujuria de la carne, la codicia de los ojos y la arrogancia de la vida no provienen del Padre.

"No améis al mundo, ni las cosas que están en el mundo. Si alguno ama al mundo, el amor del Padre no está en él. Porque todo lo que hay en el mundo, los deseos de la carne, los deseos de los ojos, y la vanagloria de la vida, no proviene del Padre, sino del mundo. Y el mundo pasa, y sus deseos; pero el que hace la voluntad de Dios permanece para siempre." 1 Juan 2.15-17

"¡Oh almas adúlteras! ¿No sabéis que la amistad del mundo es enemistad contra Dios? Cualquiera, pues, que quiera ser amigo del mundo, se constituye enemigo de Dios." Santiago 4.4

Nuestro gozo y nuestra paz está en las cosas del Espíritu de Dios; en las cosas que descienden de lo alto; que vienen del cielo... las cosas terrenales, nos las da Dios por añadidura cuando buscamos Su reino; cuando nos mantenemos en una relación íntima con el Señor. Pero el hombre natural no percibe estas cosas porque necesita nacer de nuevo; para él son locura y le causan rechazo.

"Si fuerais del mundo, el mundo amaría lo suyo; pero porque no sois del mundo, antes yo os elegí del mundo, por eso el mundo os aborrece." Juan 15.19

Cristo vive y te ama

Es necesario nacer de nuevo

Arrepiéntete y cree en el evangelio